Cлово или словосочетание на русском или испанском
Спросить ChatGPT
Книги и аудиокниги на испанском
Спросить ChatGPT
Найдено результатов: 152 (104 ms)
Eщё несколько примеров с глаголом 'estar' в этой же схеме, но когда он комбинируется с герундием, причастием, прилагательным и другими частями речи.
***
(#1)
Vicent Salvà i Pérez. Irene y Clara, o, La madre imperiosa
—[...] Tú amas al conde; pero confiesas, que al mismo tiempo te agradan las diversiones y pasatiempos, que se me harian insoportables, porqué podían distraerme de lo que más me interesaba; pues cuando el pensamiento se ocupa mucho en cualquier cosa, no deja también de tomar parte en ella el corazon. Se ve bien, le dije, que solo posees la especulativa en esta materia; y de otro modo hablaras, hermana, si te inclinases a alguno, o serías la mujer más desventurada. Reconcentrada en un solo objeto , te mataria indefectiblemente su ausencia, y YA HABRÍAS MUERTO, SI ESTUVIERAS EN LUGAR MÍO. No así me respondió; la certeza de que era amada, fortalecería mi ánimo, y le haría superior a cuantas desgracias sobrevinieran.
***
(#2)
José Libardo Porras Vallejo, Fuego de Amor Encendido
Medellín: Editorial Universidad de Antioquia, 2010
Antonio se había parado en la puerta de la oficina con la esperanza de ver a Eloísa volver el rostro y despedirse al ganar la calle. Ahora, con el arrume de papeles en las narices, sin ánimos de leer, aspirando los vapores de la camisa blanca con pechera, imagina lo que habría hecho si ella, en efecto, hubiera vuelto a mirar. ¿Habrías corrido a alcanzarla y la habrías tomado en tus brazos y besado con locura, y arrastrado a la oficina para hacerle el amor? Otro Antonio contesta: SI ESTUVIERAS PARA ACCIONES DE ESAS, Antonio Santamaría Upegui, NI SIQUIERA LA HABRÍAS DEJADO IR; cuando te entregó el regalo le habrías jurado amor por los siglos de los siglos. Él agrega: No, le habría dicho adiós con una mano.
***
(#3)
Charles Dickens, Casa Desolada
—No me cabe la menor duda —dijo Mr. Jarndyce—. Y ahora, ¿querrás subir al piso?
—Por mi vida, Jarndyce —le contestó el huésped, que parecía estar consultando su reloj—, que, SI ESTUVIERAS CASADO, YO YA HABRÍA DADO MEDIA VUELTA desde la puerta del jardín y me habría marchado hasta las cumbres más remotas del Himalaya antes que presentarme a una hora tan intempestiva.
—¡Vamos, no te habrías ido tan lejos! —bromeó Mr. Jarndyce.
—Por mi vida y por mi honor que sí —exclamó el visitante—. No habría cometido la audaz insolencia de haber hecho esperar todo este tiempo a la señora de la casa. No lo hubiera hecho por ningún motivo terrenal. Hubiera preferido matarme antes de hacerlo. Lo habría preferido infinitamente.
***
(#4)
Christine Rimmer, Novios a la fuerza
—SI ESTUVIERAS PENSANDO EN MICHAEL —gruñó Rogan—, YA HABRÍAS ACEPTADO. SI ESTUVIERAS PENSANDO EN MICHAEL, ME HABRÍAS LLAMADO en cuanto supiste que estabas embarazada.
***
(#5)
Ana María Güiraldes, Cuentos de soledad y asombro
Otra vez serio contempla a Silvia y mueve negativamente la cabeza. Luego, con gesto cansado, restriega con una mano su frente.
—Bueno, Silvia. Tuviste que tragarte mi discurso, y bien POCO HABRÍA GANADO SI ESTUVIERAS DESPIERTA. O a lo mejor sí. ¡Qué importa! En el fondo no te habría dicho nada. Ya no hablé. Todavía me acuerdo de esa vez que, para verte enrabiada, me soné con la sábana recién puesta. Claro: tú pensaste que era un cochino, y la cambiaste inmediatamente, y lo único que yo quería era verte alegar un poco, o por último, que me hicieras un comentario más o menos... qué se yo... algo lógico, lo que habría dicho cualquiera en tu caso. ¡En fin! No hay caso.
***
(#6)
Jostein Gaarder, Vita brevis
Tendrás que perdonarme, honorable obispo, pero soy ya una mujer erudita. Me siento, pues, humildemente obligada a insinuar que todo esto parece un conjuro. Imagina SI ESTUVIERAS EQUIVOCADO precisamente en punto tan decisivo. EN ESO CASO HABRÍAS DADO LA PALMA A EPICURO, como dijiste cuando aún estábamos juntos. Me inclino a pensar que Adeodato y tú habríais vuelto a Cartago inmediatamente. Así no habrías tenido elección, también tú habrías tenido que vivir como un hombre aquí y ahora, y creo que habrias tenido amor terrenal suficiente incluso para compartir conmigo y otros más.
***
(#7)
Torkom Saraydarian, El discípulo. Su desafío esencial
Evita la ira. La ira daña los pétalos de tus centros superiores. Tal vez esto no pueda demostrarse, pero es un hecho que después que estás enojado, durante varias horas no tienes energía. La ira es también peligrosa porque a menudo te hace hacer cosas que NUNCA HABRÍAS SI ESTUVIERAS EN TUS CABALES.
***
(#1)
Vicent Salvà i Pérez. Irene y Clara, o, La madre imperiosa
—[...] Tú amas al conde; pero confiesas, que al mismo tiempo te agradan las diversiones y pasatiempos, que se me harian insoportables, porqué podían distraerme de lo que más me interesaba; pues cuando el pensamiento se ocupa mucho en cualquier cosa, no deja también de tomar parte en ella el corazon. Se ve bien, le dije, que solo posees la especulativa en esta materia; y de otro modo hablaras, hermana, si te inclinases a alguno, o serías la mujer más desventurada. Reconcentrada en un solo objeto , te mataria indefectiblemente su ausencia, y YA HABRÍAS MUERTO, SI ESTUVIERAS EN LUGAR MÍO. No así me respondió; la certeza de que era amada, fortalecería mi ánimo, y le haría superior a cuantas desgracias sobrevinieran.
***
(#2)
José Libardo Porras Vallejo, Fuego de Amor Encendido
Medellín: Editorial Universidad de Antioquia, 2010
Antonio se había parado en la puerta de la oficina con la esperanza de ver a Eloísa volver el rostro y despedirse al ganar la calle. Ahora, con el arrume de papeles en las narices, sin ánimos de leer, aspirando los vapores de la camisa blanca con pechera, imagina lo que habría hecho si ella, en efecto, hubiera vuelto a mirar. ¿Habrías corrido a alcanzarla y la habrías tomado en tus brazos y besado con locura, y arrastrado a la oficina para hacerle el amor? Otro Antonio contesta: SI ESTUVIERAS PARA ACCIONES DE ESAS, Antonio Santamaría Upegui, NI SIQUIERA LA HABRÍAS DEJADO IR; cuando te entregó el regalo le habrías jurado amor por los siglos de los siglos. Él agrega: No, le habría dicho adiós con una mano.
***
(#3)
Charles Dickens, Casa Desolada
—No me cabe la menor duda —dijo Mr. Jarndyce—. Y ahora, ¿querrás subir al piso?
—Por mi vida, Jarndyce —le contestó el huésped, que parecía estar consultando su reloj—, que, SI ESTUVIERAS CASADO, YO YA HABRÍA DADO MEDIA VUELTA desde la puerta del jardín y me habría marchado hasta las cumbres más remotas del Himalaya antes que presentarme a una hora tan intempestiva.
—¡Vamos, no te habrías ido tan lejos! —bromeó Mr. Jarndyce.
—Por mi vida y por mi honor que sí —exclamó el visitante—. No habría cometido la audaz insolencia de haber hecho esperar todo este tiempo a la señora de la casa. No lo hubiera hecho por ningún motivo terrenal. Hubiera preferido matarme antes de hacerlo. Lo habría preferido infinitamente.
***
(#4)
Christine Rimmer, Novios a la fuerza
—SI ESTUVIERAS PENSANDO EN MICHAEL —gruñó Rogan—, YA HABRÍAS ACEPTADO. SI ESTUVIERAS PENSANDO EN MICHAEL, ME HABRÍAS LLAMADO en cuanto supiste que estabas embarazada.
***
(#5)
Ana María Güiraldes, Cuentos de soledad y asombro
Otra vez serio contempla a Silvia y mueve negativamente la cabeza. Luego, con gesto cansado, restriega con una mano su frente.
—Bueno, Silvia. Tuviste que tragarte mi discurso, y bien POCO HABRÍA GANADO SI ESTUVIERAS DESPIERTA. O a lo mejor sí. ¡Qué importa! En el fondo no te habría dicho nada. Ya no hablé. Todavía me acuerdo de esa vez que, para verte enrabiada, me soné con la sábana recién puesta. Claro: tú pensaste que era un cochino, y la cambiaste inmediatamente, y lo único que yo quería era verte alegar un poco, o por último, que me hicieras un comentario más o menos... qué se yo... algo lógico, lo que habría dicho cualquiera en tu caso. ¡En fin! No hay caso.
***
(#6)
Jostein Gaarder, Vita brevis
Tendrás que perdonarme, honorable obispo, pero soy ya una mujer erudita. Me siento, pues, humildemente obligada a insinuar que todo esto parece un conjuro. Imagina SI ESTUVIERAS EQUIVOCADO precisamente en punto tan decisivo. EN ESO CASO HABRÍAS DADO LA PALMA A EPICURO, como dijiste cuando aún estábamos juntos. Me inclino a pensar que Adeodato y tú habríais vuelto a Cartago inmediatamente. Así no habrías tenido elección, también tú habrías tenido que vivir como un hombre aquí y ahora, y creo que habrias tenido amor terrenal suficiente incluso para compartir conmigo y otros más.
***
(#7)
Torkom Saraydarian, El discípulo. Su desafío esencial
Evita la ira. La ira daña los pétalos de tus centros superiores. Tal vez esto no pueda demostrarse, pero es un hecho que después que estás enojado, durante varias horas no tienes energía. La ira es también peligrosa porque a menudo te hace hacer cosas que NUNCA HABRÍAS SI ESTUVIERAS EN TUS CABALES.
Nueva Gramática de la lengua española (NGLE),
RAE, Asociación de Academias de la Lengua Española, 2009
25.14h Cuando después expresa posterioridad, rechaza el futuro, al igual que cuando,
mientras y otras expresiones que se analizan en el § 24.9: *después de que llegarás. En
estos contextos temporales, alternan indicativo y subjuntivo en el español americano. El
uso del subjuntivo es compartido por el español europeo, en el que constituye la opción
mayoritaria:
La prima Hildebranda Sánchez había venido a visitarla poco después de que ella estuviera en su
hacienda (García Márquez, Amor); ¿Qué te parece, hija, si después de que acabe todo esto, nos vamos
tú y yo por ahí? (Gallego, Adelaida); [...] después de que el cuerpo de alguno hubiese empezado
a largar la sangre como vino por cuello de odre (Carpentier, Siglo); Dijo Lumina cuando aquella
tarde, después de que reposara en la cama un rato, ayudó a Dacio a levantarse (Diez, Fulgor).
En cambio, el indicativo es habitual en el español americano en estas construcciones
temporales. Repárese en que después no alterna en ellas con encima o con además, a diferencia
de las que se analizaron en el apartado precedente:
Los caliés se llevaron a Manuel esta madrugada, poco después de que saliste de allá (Vargas
Llosa, Fiesta); —¿Viste a la abuela en la regadera? —preguntó Leonor. —Después de que estuvo
con el abuelo, bien que la vi (Aguilar Camín, Error); Dejaron a Rafael Moneada aprovisionado
de agua, pan y jamón, después de que Nuria le limpió y vendó el corte del brazo (Allende, Zorro);
Pero después de que la tía Rebeca se hizo cargo de la casa —y mucho después de que Natanael
se borró [...]— (García Márquez, Obra periodística); Pero, después de que Porzia lo abandonó,
atraída por la opulencia del duque de Mugnano, sus investigaciones tomaron un rumbo
más práctico y concreto (Mujica Lainez, Bomarzo).
Este uso es infrecuente en el español europeo, pero se registra también en él: Después de
que tú te fuiste, dejando correr a la fantasía detrás de unos perros famélicos comprendí que
precisamente me habías abandonado porque no había quedado embarazada (Benet, Región).
No existe diferencia apreciable de significado en estos contrastes. Las subordinadas
que complementan al adverbio antes se construyen siempre con subjuntivo: antes de
que {*amanece ~ amanezca}.
RAE, Asociación de Academias de la Lengua Española, 2009
25.14h Cuando después expresa posterioridad, rechaza el futuro, al igual que cuando,
mientras y otras expresiones que se analizan en el § 24.9: *después de que llegarás. En
estos contextos temporales, alternan indicativo y subjuntivo en el español americano. El
uso del subjuntivo es compartido por el español europeo, en el que constituye la opción
mayoritaria:
La prima Hildebranda Sánchez había venido a visitarla poco después de que ella estuviera en su
hacienda (García Márquez, Amor); ¿Qué te parece, hija, si después de que acabe todo esto, nos vamos
tú y yo por ahí? (Gallego, Adelaida); [...] después de que el cuerpo de alguno hubiese empezado
a largar la sangre como vino por cuello de odre (Carpentier, Siglo); Dijo Lumina cuando aquella
tarde, después de que reposara en la cama un rato, ayudó a Dacio a levantarse (Diez, Fulgor).
En cambio, el indicativo es habitual en el español americano en estas construcciones
temporales. Repárese en que después no alterna en ellas con encima o con además, a diferencia
de las que se analizaron en el apartado precedente:
Los caliés se llevaron a Manuel esta madrugada, poco después de que saliste de allá (Vargas
Llosa, Fiesta); —¿Viste a la abuela en la regadera? —preguntó Leonor. —Después de que estuvo
con el abuelo, bien que la vi (Aguilar Camín, Error); Dejaron a Rafael Moneada aprovisionado
de agua, pan y jamón, después de que Nuria le limpió y vendó el corte del brazo (Allende, Zorro);
Pero después de que la tía Rebeca se hizo cargo de la casa —y mucho después de que Natanael
se borró [...]— (García Márquez, Obra periodística); Pero, después de que Porzia lo abandonó,
atraída por la opulencia del duque de Mugnano, sus investigaciones tomaron un rumbo
más práctico y concreto (Mujica Lainez, Bomarzo).
Este uso es infrecuente en el español europeo, pero se registra también en él: Después de
que tú te fuiste, dejando correr a la fantasía detrás de unos perros famélicos comprendí que
precisamente me habías abandonado porque no había quedado embarazada (Benet, Región).
No existe diferencia apreciable de significado en estos contrastes. Las subordinadas
que complementan al adverbio antes se construyen siempre con subjuntivo: antes de
que {*amanece ~ amanezca}.
Mentirilla
Mentirilla
Erase una vez un humilde carpintero que se encontraba cortando la rama de un árbol junto a un río. De pronto, el hacha se le salió de la mano y fue a dar al lecho del río.
El infeliz carpintero le ruega a Dios, quien se le aparece y le pregunta:
- ¿Por qué estas llorando?.
El carpintero, temeroso, le responde que el hacha se le cayó en el río. Dios se mete al río, saca una hacha de oro, y le pregunta: ¿Es ésta tu hacha?.
El noble carpintero responde:
- ¡No!..
Dios se mete de nuevo al río y saca una hacha de plata:
- Y ésta, ¿es la tuya?.
De nuevo vuelve a decir el carpintero:
- No, esa no es la mía.
Dios vuelve al río, saca una hacha de madera y pregunta:
- ¿Es ésta tu hacha?.
El carpintero, contento, le responde:
- ¡Sí, esa sí es!.
Dios estaba tan contento con la sinceridad del carpintero que le devolvió su hacha, regaló las otras dos, y mandó al carpintero a su casa.
Un día paseaban por el campo el carpintero y su esposa. Al intentar cruzarlo saltando sobre unas piedras, la señora tropezó y cayó al río.
El infeliz carpintero le ruega a Dios y Dios se le aparece y le pregunta:
- ¿Por qué estas llorando, hijo mío?.
El carpintero le responde que su esposa se cayó al río.
Dios se mete al río y saca a Jennifer López.
- ¿Es ésta tu esposa?.
- ¡Sí, sí!, contesta el carpintero.
Dios se enfurece.
-¡Eres un mentiroso, un rufián!.
El carpintero contesta:
- Oh, Dios perdóname. Mentiroso no. Creo que ha habido un malentendido. Verás: si te digo que no es Jennifer López, después tu me sacarías a Paulina Rubio. Después, si digo que no es Paulina Rubio tampoco, por último sacarías a mi esposa. Entonces, yo tendría que decir que sí es ella, y entonces tú me mandarías a casa con las tres. Dios, yo soy un humilde carpintero y no podría mantener a esas tres mujeres. Por eso, dije "si" la primera vez.
MORALEJA:
Los hombres sólo mienten por causas honorables y con buenas intenciones.
¿VEN PORQUE MIENTO ALGUNAS VECES?
Erase una vez un humilde carpintero que se encontraba cortando la rama de un árbol junto a un río. De pronto, el hacha se le salió de la mano y fue a dar al lecho del río.
El infeliz carpintero le ruega a Dios, quien se le aparece y le pregunta:
- ¿Por qué estas llorando?.
El carpintero, temeroso, le responde que el hacha se le cayó en el río. Dios se mete al río, saca una hacha de oro, y le pregunta: ¿Es ésta tu hacha?.
El noble carpintero responde:
- ¡No!..
Dios se mete de nuevo al río y saca una hacha de plata:
- Y ésta, ¿es la tuya?.
De nuevo vuelve a decir el carpintero:
- No, esa no es la mía.
Dios vuelve al río, saca una hacha de madera y pregunta:
- ¿Es ésta tu hacha?.
El carpintero, contento, le responde:
- ¡Sí, esa sí es!.
Dios estaba tan contento con la sinceridad del carpintero que le devolvió su hacha, regaló las otras dos, y mandó al carpintero a su casa.
Un día paseaban por el campo el carpintero y su esposa. Al intentar cruzarlo saltando sobre unas piedras, la señora tropezó y cayó al río.
El infeliz carpintero le ruega a Dios y Dios se le aparece y le pregunta:
- ¿Por qué estas llorando, hijo mío?.
El carpintero le responde que su esposa se cayó al río.
Dios se mete al río y saca a Jennifer López.
- ¿Es ésta tu esposa?.
- ¡Sí, sí!, contesta el carpintero.
Dios se enfurece.
-¡Eres un mentiroso, un rufián!.
El carpintero contesta:
- Oh, Dios perdóname. Mentiroso no. Creo que ha habido un malentendido. Verás: si te digo que no es Jennifer López, después tu me sacarías a Paulina Rubio. Después, si digo que no es Paulina Rubio tampoco, por último sacarías a mi esposa. Entonces, yo tendría que decir que sí es ella, y entonces tú me mandarías a casa con las tres. Dios, yo soy un humilde carpintero y no podría mantener a esas tres mujeres. Por eso, dije "si" la primera vez.
MORALEJA:
Los hombres sólo mienten por causas honorables y con buenas intenciones.
¿VEN PORQUE MIENTO ALGUNAS VECES?
Aquí no hay nada que discutir porque todo esta explicito en RAE:
La última pregunta mía era:
Но здесь, по моему мнению, интереснее даже не это, а другое, какая разница между фразами:
El coronel se había olvidado del entierro.
El coronel había olvidado el entierro.
Что вы думаете на этот счёт?
Pues, hombre, la RAE dice muy claro sobre la materia:
olvidar(se). ‘Dejar de tener en la memoria algo o a alguien’, ‘dejar de tener afecto a alguien o algo’ y ‘no tener en cuenta algo o a alguien’. En el español general culto este verbo admite distintas construcciones:
a) Como transitivo, con sujeto de persona y un complemento directo que expresa lo olvidado (olvidar [algo o a alguien]): «Matamoros Moreno había olvidado al asistente. ¿Lo había olvidado?» (Fuentes Cristóbal [Méx. 1987]); «No olvide arroparse bien» (Donoso Casa [Chile 1978]); «Andrés olvidó que tenía partido» (Mastretta Vida [Méx. 1990]); «¿Has olvidado dónde estamos?» (RRosa Sebastián [Guat. 1994]). Cuando significa ‘dejar [algo] en un sitio por descuido’, además del complemento directo, puede llevar opcionalmente un pronombre átono concertado con el sujeto: «Me olvidé la llave» (Daulte Noche [Arg. 1994]).
b) Como intransitivo pronominal, con sujeto de persona y un complemento introducido por de, que expresa lo olvidado (olvidarse de algo o alguien): «Creía que ya me había olvidado de aquella mujer» (Quintero Danza [Ven. 1991]); «No se olvide de pedirle un aumento a su señor padre» (Bayly Días [Perú 1996]); «Me olvidé de que existía el Museo del Prado» (Galeano Días [Ur. 1978]); «Me olvido de dónde están las cosas» (Montero Trenza [Cuba 1987]). Aunque ya desde antiguo es frecuente omitir la preposición de cuando el complemento es una oración subordinada, especialmente en la lengua oral y coloquial (Me olvidé que..., Me olvido dónde...), se recomienda mantenerla en el habla esmerada.
c) Es también correcta la construcción intransitiva pronominal olvidársele algo a alguien, en la que el sujeto es lo olvidado y la persona que olvida se expresa mediante un complemento indirecto: «Se le olvidaron [a mi madre] sus otros hijos» (Rossi María [C. Rica 1985]); «Se les olvidó borrar el letrero» (Serrano Vida [Chile 1995]); «¿Ya se te olvidó que te estamos haciendo el favor de tenerte aquí?» (Victoria Casta [Méx. 1995]). Es incorrecto anteponer la preposición de al sujeto (→ dequeísmo, 1a): Se me olvida de que...
La última pregunta mía era:
Но здесь, по моему мнению, интереснее даже не это, а другое, какая разница между фразами:
El coronel se había olvidado del entierro.
El coronel había olvidado el entierro.
Что вы думаете на этот счёт?
Pues, hombre, la RAE dice muy claro sobre la materia:
olvidar(se). ‘Dejar de tener en la memoria algo o a alguien’, ‘dejar de tener afecto a alguien o algo’ y ‘no tener en cuenta algo o a alguien’. En el español general culto este verbo admite distintas construcciones:
a) Como transitivo, con sujeto de persona y un complemento directo que expresa lo olvidado (olvidar [algo o a alguien]): «Matamoros Moreno había olvidado al asistente. ¿Lo había olvidado?» (Fuentes Cristóbal [Méx. 1987]); «No olvide arroparse bien» (Donoso Casa [Chile 1978]); «Andrés olvidó que tenía partido» (Mastretta Vida [Méx. 1990]); «¿Has olvidado dónde estamos?» (RRosa Sebastián [Guat. 1994]). Cuando significa ‘dejar [algo] en un sitio por descuido’, además del complemento directo, puede llevar opcionalmente un pronombre átono concertado con el sujeto: «Me olvidé la llave» (Daulte Noche [Arg. 1994]).
b) Como intransitivo pronominal, con sujeto de persona y un complemento introducido por de, que expresa lo olvidado (olvidarse de algo o alguien): «Creía que ya me había olvidado de aquella mujer» (Quintero Danza [Ven. 1991]); «No se olvide de pedirle un aumento a su señor padre» (Bayly Días [Perú 1996]); «Me olvidé de que existía el Museo del Prado» (Galeano Días [Ur. 1978]); «Me olvido de dónde están las cosas» (Montero Trenza [Cuba 1987]). Aunque ya desde antiguo es frecuente omitir la preposición de cuando el complemento es una oración subordinada, especialmente en la lengua oral y coloquial (Me olvidé que..., Me olvido dónde...), se recomienda mantenerla en el habla esmerada.
c) Es también correcta la construcción intransitiva pronominal olvidársele algo a alguien, en la que el sujeto es lo olvidado y la persona que olvida se expresa mediante un complemento indirecto: «Se le olvidaron [a mi madre] sus otros hijos» (Rossi María [C. Rica 1985]); «Se les olvidó borrar el letrero» (Serrano Vida [Chile 1995]); «¿Ya se te olvidó que te estamos haciendo el favor de tenerte aquí?» (Victoria Casta [Méx. 1995]). Es incorrecto anteponer la preposición de al sujeto (→ dequeísmo, 1a): Se me olvida de que...
Queridos amigos, no imaginan con qué entusiasmo leí todos los mensajes de abajo, para un amante de la literatura rusa que vive en estas latitudes, tan lejos en tiempo y espacio de los hechos que narran, leer estas anécdotas sobre una obra tan querida y que he leído tanto es emocionante. El relato de Carlos, acerca de cómo recibían y esperaban la publicación de la novela... como si yo hubiese estado allí! Kuzia, no sé qué le ven los hispanohablantes a la novela, o sí, podría escribir largamente sobre eso, pero te aseguro que todos los que la leen quedan fascinados. Es el gusto por los clásicos, las obras que superan la media de su época y se vuelven universales y eternas, no hace falta ser griego para disfrutar la Odisea, ni español para disfrutar de Don Quijote, por más que los hablantes nativos tengan innumerables ventajas para aprovecharlas mejor (idioma, cultura, contexto, etc.)Una obra como El maestro y Margarita, o La guerra y la paz, o Almas muertas son patrimonio de la humanidad. Y muchas veces los lectores extranjeros ven cosas que los lectores nativos no, precisamente por la riqueza que aporta siempre una mirada distinta (y distante) sobre un mismo objeto. La novela de Trifonov está traducida al castellano, el título es "La casa del malecón", no recuerdo la editorial pero la buscaré en mi biblioteca, sé que la tengo, y la leí hace años. Ya que estamos, me gustaría saber qué tipo de población tiene actualmente ese edificio, que por lo que vi tiene una vista privilegiada. Saludos!!!
Кузя dice: e-je… parece que nadie más había leído estas obras ;)
Carlos, muchísimas gracias por compartir tus experiencias. Para mi son muy valiosas. De todas formas tu caso es muy peculiar. Primero, porque tú tenías el privilegio de leerla en original y, segundo, tú SABÍAS de qué se trataba porque vivías allí, en Rusia, en Moscú (?), podías palpar algo del ambiente de aquella época o si no, por lo menos, imaginarlo. Lo “fantástico” (para no decir absurdo) de la realidad soviética aun estaba muy presente en tu época estudiantil, ¿verdad? ;) Todo esto lo entiendo. Pero lo que sigue siendo una incógnita para mí es QUÉ es lo que ven los hispanohablantes en estas dos obras leyéndolas en castellano y CÓMO encajan en su mentalidad tan distinta de la nuestra, los que encajan, claro, porque tampoco son muchos, para qué nos vamos a engañar.
Sí, vivía en Moscú y vivía en un apartamento "comunitario" en el centro de la ciudad, apenas un minuto del edificio central del KGB y un minuto y medio del CC del PCUS. A paso lento y nocturno unos ocho minutos del Kremlin, paso lento y nocturno, pues solía salir de casa a dar una vuelta, fuera cual fuera el tiempo que hiciera, iba hasta el Mausoleo, no era una visita religiosa, ni turistica, sino que muy morbosa, me gustaba ver a los guardias marchar con sus pasos militares y esperaba sin mucha esperanza, que alguna vez uno de ellos se diera un resbalón... Luego bajaba hacia la plaza K. Marx y me perdía sin darme cuenta, buscando algún callejón desconocido. ¡Cuántos encuentros en esas caminatas! Pero esto no tiene nada que ver con tu pregunta. De todos modos ya Vladimir te dio una respuesta y la manera de procurarte el texto de la "explicación". Al escribir esto me ha venido a la memoria, al vendedor de revistas y diarios, de Kabelnaya, que muy bondadoso me apartaba los números que se disparaban desde temprano. Gracias a él pude leer muchos textos importantes. A este viejito lo quise con toda mi alma. Lo recuerdo mucho, mucho.
En realidad, no te puedo responder sobre cuál puede ser la reacción de un lector hispanohablante, pues a pesar de mi alejamiento del ruso, nunca dejé de leerlo y no leo la literatura rusa en traducción. Si la traducción es buena, creo que la gozarán, como cualquier otra obra literaria.
Carlos, muchísimas gracias por compartir tus experiencias. Para mi son muy valiosas. De todas formas tu caso es muy peculiar. Primero, porque tú tenías el privilegio de leerla en original y, segundo, tú SABÍAS de qué se trataba porque vivías allí, en Rusia, en Moscú (?), podías palpar algo del ambiente de aquella época o si no, por lo menos, imaginarlo. Lo “fantástico” (para no decir absurdo) de la realidad soviética aun estaba muy presente en tu época estudiantil, ¿verdad? ;) Todo esto lo entiendo. Pero lo que sigue siendo una incógnita para mí es QUÉ es lo que ven los hispanohablantes en estas dos obras leyéndolas en castellano y CÓMO encajan en su mentalidad tan distinta de la nuestra, los que encajan, claro, porque tampoco son muchos, para qué nos vamos a engañar.
Sí, vivía en Moscú y vivía en un apartamento "comunitario" en el centro de la ciudad, apenas un minuto del edificio central del KGB y un minuto y medio del CC del PCUS. A paso lento y nocturno unos ocho minutos del Kremlin, paso lento y nocturno, pues solía salir de casa a dar una vuelta, fuera cual fuera el tiempo que hiciera, iba hasta el Mausoleo, no era una visita religiosa, ni turistica, sino que muy morbosa, me gustaba ver a los guardias marchar con sus pasos militares y esperaba sin mucha esperanza, que alguna vez uno de ellos se diera un resbalón... Luego bajaba hacia la plaza K. Marx y me perdía sin darme cuenta, buscando algún callejón desconocido. ¡Cuántos encuentros en esas caminatas! Pero esto no tiene nada que ver con tu pregunta. De todos modos ya Vladimir te dio una respuesta y la manera de procurarte el texto de la "explicación". Al escribir esto me ha venido a la memoria, al vendedor de revistas y diarios, de Kabelnaya, que muy bondadoso me apartaba los números que se disparaban desde temprano. Gracias a él pude leer muchos textos importantes. A este viejito lo quise con toda mi alma. Lo recuerdo mucho, mucho.
En realidad, no te puedo responder sobre cuál puede ser la reacción de un lector hispanohablante, pues a pesar de mi alejamiento del ruso, nunca dejé de leerlo y no leo la literatura rusa en traducción. Si la traducción es buena, creo que la gozarán, como cualquier otra obra literaria.
Un texto que circula entre profesores de lengua en argentina:
Lleno de argentinismos.
"Nuestro querido idioma castellano"
Protagonistas: una familia y una visitante canadiense, que se alojó en la casa del emisor por espacio de tres meses.
La historia es digna de un profundo análisis lingüístico y palabra más, palabra menos, es así:
Durante un plácido almuerzo, de pronto, la ilustre visitante,en un castellano con marcado acento canadiense, preguntó inocentemente:
- Pero... para ustedes ... ¿todo es pedo?
- ¿¿¿Cóóómo...???
- Sí, claro... Es que hay cosas que todavía no entiendo del todo...
- ¿Por ejemplo?
- Hoy Agustín fue caminando hasta el centro a cambiar una remera y el negocio estaba cerrado. Cuando volvió dijo: 'Me hicieron ir al pedo'.
- Claro, eso significa que fue de gusto.... o sea, en vano, inútilmente..
- Sí, sí, pero en plural es diferente. Cuando el otro día vinimos en taxi,
al bajar Micaela dijo: 'Este tachero nos trajo a los pedos'.
- Eso quiere decir que venían rápido...
- Sí, ya me di cuenta. Pero me resulta difícil entender la diferencia del singular al plural... Además... hay otras frases que no son lo mismo, por ejemplo:
Estar 'en' pedo, que estar 'al' pedo.
- Claro, estar 'en' pedo, es estar borracho; estar 'al' pedo, es estar sin hacer nada.....
- ¡Eso! ¡eso!, suena parecido a ir 'al pedo'... Pero..... también lo usan cuando quieren significar negativa a hacer algo...
- A veces, en ese caso decimos: - 'No voy a ir ni en pedo', que significa que de ninguna manera lo haremos, o sea... ni borracho iría, ¿me entendés?
- Sí, ahora sí. Aunque todavía me queda otra; cuando el otro día Agustín no puso la mesa y vos te enojaste, Agustín luego me contó que vos lo habías 'cagado a pedos'...
- Sí, en ese caso quiere decir que lo reté, que le llamé la atención...
- Ahora entiendo un poco más... pero... me acordé de otra. Cuando fuimos al partido de fútbol y el delantero hizo un gol, el comentario de Agustín fue: 'Le salió de pedo'...
- Eso significa que lo hizo por pura suerte, que fue de casualidad.. .¿sí?
- Sí. Una última pregunta... ¿qué quieren decir cuando Micaela le dice a Agustín: '¿¿¿¡¡¡vos... te tiraste un pedo!!!???'. ..
- Ah no, disculpame, los otros pedos no importan, pero eso no se dice, es de muy mala educación decirle a otro en público, que se tiró un pedo...
NO HAY CASO...NO NOS ENTIENDE NADIE...O SEA: ES AL PEDO EXPLICARLE A UN EXTRANJERO NUESTRO IDIOMA...!
Lleno de argentinismos.
"Nuestro querido idioma castellano"
Protagonistas: una familia y una visitante canadiense, que se alojó en la casa del emisor por espacio de tres meses.
La historia es digna de un profundo análisis lingüístico y palabra más, palabra menos, es así:
Durante un plácido almuerzo, de pronto, la ilustre visitante,en un castellano con marcado acento canadiense, preguntó inocentemente:
- Pero... para ustedes ... ¿todo es pedo?
- ¿¿¿Cóóómo...???
- Sí, claro... Es que hay cosas que todavía no entiendo del todo...
- ¿Por ejemplo?
- Hoy Agustín fue caminando hasta el centro a cambiar una remera y el negocio estaba cerrado. Cuando volvió dijo: 'Me hicieron ir al pedo'.
- Claro, eso significa que fue de gusto.... o sea, en vano, inútilmente..
- Sí, sí, pero en plural es diferente. Cuando el otro día vinimos en taxi,
al bajar Micaela dijo: 'Este tachero nos trajo a los pedos'.
- Eso quiere decir que venían rápido...
- Sí, ya me di cuenta. Pero me resulta difícil entender la diferencia del singular al plural... Además... hay otras frases que no son lo mismo, por ejemplo:
Estar 'en' pedo, que estar 'al' pedo.
- Claro, estar 'en' pedo, es estar borracho; estar 'al' pedo, es estar sin hacer nada.....
- ¡Eso! ¡eso!, suena parecido a ir 'al pedo'... Pero..... también lo usan cuando quieren significar negativa a hacer algo...
- A veces, en ese caso decimos: - 'No voy a ir ni en pedo', que significa que de ninguna manera lo haremos, o sea... ni borracho iría, ¿me entendés?
- Sí, ahora sí. Aunque todavía me queda otra; cuando el otro día Agustín no puso la mesa y vos te enojaste, Agustín luego me contó que vos lo habías 'cagado a pedos'...
- Sí, en ese caso quiere decir que lo reté, que le llamé la atención...
- Ahora entiendo un poco más... pero... me acordé de otra. Cuando fuimos al partido de fútbol y el delantero hizo un gol, el comentario de Agustín fue: 'Le salió de pedo'...
- Eso significa que lo hizo por pura suerte, que fue de casualidad.. .¿sí?
- Sí. Una última pregunta... ¿qué quieren decir cuando Micaela le dice a Agustín: '¿¿¿¡¡¡vos... te tiraste un pedo!!!???'. ..
- Ah no, disculpame, los otros pedos no importan, pero eso no se dice, es de muy mala educación decirle a otro en público, que se tiró un pedo...
NO HAY CASO...NO NOS ENTIENDE NADIE...O SEA: ES AL PEDO EXPLICARLE A UN EXTRANJERO NUESTRO IDIOMA...!
Catalanismos en castellano
El catalán y el castellano son lenguas hermanas: las dos han salido de la misma madre, el latín, y se han criado en la misma casa, la Península Ibérica. Han crecido juntas, y como buenas hermanas que son se han prestado muchas cosas a lo largo de los años. Por eso en castellano encontramos hoy un número nada desdeñable de catalanismos.
Algunos tienen que ver con la gastronomía y se refieren a alimentos o utensilios existentes en los territorios de habla catalana y que Castilla conoció por su mediación, por ejemplo, paella, alioli, dátil, turrón, ensaimada, perol y butifarra.
Otros pertenecen al ámbito amplio de la economía, manufacturas, comercio, trabajo, etc., como peseta, cordel, cantimplora, faena, granel, papel, retal, esquirol, bajel, guante, pólvora, pincel y sastre.
Algunos se refieren a categorizaciones sociales, como orate, charnego y forastero.
También los hay relacionados con la vivienda: barraca, retrete y picaporte.
Entre los términos botánicos podemos citar clavel y trébol.
También son catalanismos capicúa, añoranza, salvaje y muchas otras palabras tan arraigadas hoy en castellano que ni siquiera sospecharíamos que fueron en su día préstamos.
Otra lengua con la que el catalán mantuvo un estrecho e intenso contacto durante siglos es el italiano. Muchos vocablos y conceptos de origen italiano llegan a la Península Ibérica por mediación catalana; y también en el léxico italiano ha dejado su huella el catalán, pero de eso ya tendría que ocuparse un blog de lengua italiana o catalana.
Si te interesa el tema, puedes consultar este trabajo de Claudia Sánchez, estudiante de Filología Hispánica en Salamanca, sobre los catalanismos en castellano.
El catalán y el castellano son lenguas hermanas: las dos han salido de la misma madre, el latín, y se han criado en la misma casa, la Península Ibérica. Han crecido juntas, y como buenas hermanas que son se han prestado muchas cosas a lo largo de los años. Por eso en castellano encontramos hoy un número nada desdeñable de catalanismos.
Algunos tienen que ver con la gastronomía y se refieren a alimentos o utensilios existentes en los territorios de habla catalana y que Castilla conoció por su mediación, por ejemplo, paella, alioli, dátil, turrón, ensaimada, perol y butifarra.
Otros pertenecen al ámbito amplio de la economía, manufacturas, comercio, trabajo, etc., como peseta, cordel, cantimplora, faena, granel, papel, retal, esquirol, bajel, guante, pólvora, pincel y sastre.
Algunos se refieren a categorizaciones sociales, como orate, charnego y forastero.
También los hay relacionados con la vivienda: barraca, retrete y picaporte.
Entre los términos botánicos podemos citar clavel y trébol.
También son catalanismos capicúa, añoranza, salvaje y muchas otras palabras tan arraigadas hoy en castellano que ni siquiera sospecharíamos que fueron en su día préstamos.
Otra lengua con la que el catalán mantuvo un estrecho e intenso contacto durante siglos es el italiano. Muchos vocablos y conceptos de origen italiano llegan a la Península Ibérica por mediación catalana; y también en el léxico italiano ha dejado su huella el catalán, pero de eso ya tendría que ocuparse un blog de lengua italiana o catalana.
Si te interesa el tema, puedes consultar este trabajo de Claudia Sánchez, estudiante de Filología Hispánica en Salamanca, sobre los catalanismos en castellano.
Hola Amateur
El tema en esta cuestión se relaciona en parte por lo menos en argentina en su Código Civil donde se indica en el art. 1493 al 1622.
mencionándose ,como sinónimos a interpretarse, también al que arrenda se le llama Arrendador, Dueño o Locador ,siempre y cuando este legalmente habilitado para tal fin y al Inquilino se lo llama Arrendatario, Locatario o Inquilino, la raíz es meramente casual en el caso de los supuesto legales en el que este encuadrada la figura, pero son solo sinónimos, como también llamarlo al alquiler o sea el precio "canon locativo", pasa también que la palabra "arrendamiento" se entiende como el alquiler de bienes inmuebles a cultivar o de pastoreo (campos, quintas , bosques para su tala o anticresis)a su vez se comprendía como propiedad a una casa y sus terreno para cultivar, no me quiero extender demasiado en este tema que manejo desde hace 18 años y del cual vivo.
Desde ya espero que te sirva mi felino amigo.
El tema en esta cuestión se relaciona en parte por lo menos en argentina en su Código Civil donde se indica en el art. 1493 al 1622.
mencionándose ,como sinónimos a interpretarse, también al que arrenda se le llama Arrendador, Dueño o Locador ,siempre y cuando este legalmente habilitado para tal fin y al Inquilino se lo llama Arrendatario, Locatario o Inquilino, la raíz es meramente casual en el caso de los supuesto legales en el que este encuadrada la figura, pero son solo sinónimos, como también llamarlo al alquiler o sea el precio "canon locativo", pasa también que la palabra "arrendamiento" se entiende como el alquiler de bienes inmuebles a cultivar o de pastoreo (campos, quintas , bosques para su tala o anticresis)a su vez se comprendía como propiedad a una casa y sus terreno para cultivar, no me quiero extender demasiado en este tema que manejo desde hace 18 años y del cual vivo.
Desde ya espero que te sirva mi felino amigo.
(Continuación...)
Más veloz que Superman
Y pasan los minutos…
Uno –valiente como nadie- sale a las calles de Moscú, haciendo caso omiso de que seguramente el 99,9% de los transeúntes no habla español (el 0,1% es para que no se diga que estoy siendo negativo…).
Y uno camina rápido, decidido, con “los miembros de acero” como diría Rimbaud, rumbo a destino: el Metro de Moscú.
Y cuando uno llega y entra en la estación, y pasa los torniquetes –con una tarjeta de diez pasajes que te compró un amigo piadoso-, y camina “cual ruso” por la estación y llega a la escalera mecánica, y se pone en la fila que va descendiendo a uno de los “Palacios del Pueblo”, como se les llamaban en la era soviética, entonces, en ese preciso instante, uno siente que está volando y que los idiomas ya no importan porque el MUNDO es una amplia esfera en donde TODOS hablamos una lengua universal y uno vuela y vuela y VUELA y se alza por los aires y se encamina a la casa del amigo a la que uno llegará en Metro y sin perderse, porque uno llegará y uno, en ese instante, cree escuchar a la Orquesta Filarmónica de Londres interpretando el tema central de la banda sonora de “Superman”… hasta que llega a los andenes ¡y se da cuenta de que no sabe LEER en ruso y no puede siquiera intuir cuales son los nombres de las estaciones del Metro!
Entonces, te das cuenta de que estás ABSOLUTAMENTE PERDIDO y de que por más que preguntes en “español” probablemente nadie vaya a responderte. Entonces, te viene el “pánico escénico” y te quedas como inmovilizado. ¡Santo Dios! ¡Ayuda! ¡Ayuda!
Así es que, en aquella oportunidad, salí del Metro, llame a un conocido ruso y le pedí que por celular le dijera a un taxista cual era mi destino.
“Friansestuya ¿me entiende?”
En otra ocasión también me extravié en el subterráneo camino al metro ”Frunzenskaya” (en ruso: Фру́нзенская). Como, obviamente, sin saber leer uno tampoco habla muy bien… me puse a preguntarle a la gente con sólo dos palabras, pues claro ¿cómo podría decir en ruso: “disculpe ¿usted me podría indicar dónde queda el Metro ”Frunzenskaya”?”. Y esas palabras eran: “¿Friansestuya Metro?”. Y así andaba repitiéndole a todo el mundo, con algunas variaciones en una letra de repente. “¿Friansestuya Metro?”, “¿Frionsestuya Metro?”, “¿Fransestuta Metro?”. “¿Friensestuya Metro?”.
Obviamente, nadie podía contestarme… Hasta que un ruso me observó fijamente y advirtió mi nerviosismo creciente al verme del todo perdido. Y trató de entender lo que decía mirando mis labios. De pronto, exclamo: “¡AHHHHHHHHHH, ”Frunzenskaya!”. Me dieron ganas de abrazarle ahí mismo. ¡Sí: eso: Frunzenskaya…! Me indicó con la mano que tomara la línea de la derecha, dijo algo en ruso y me mostró con los dedos el número 4, así es que entendí que debía bajarme en la cuarta estación.
Gracias a ese bondadoso ruso pude llegar al sitio adonde me dirigía.
Desde aquí y pasado el tiempo le doy mi sincero agradecimiento.
(Франcиско R.)
Más veloz que Superman
Y pasan los minutos…
Uno –valiente como nadie- sale a las calles de Moscú, haciendo caso omiso de que seguramente el 99,9% de los transeúntes no habla español (el 0,1% es para que no se diga que estoy siendo negativo…).
Y uno camina rápido, decidido, con “los miembros de acero” como diría Rimbaud, rumbo a destino: el Metro de Moscú.
Y cuando uno llega y entra en la estación, y pasa los torniquetes –con una tarjeta de diez pasajes que te compró un amigo piadoso-, y camina “cual ruso” por la estación y llega a la escalera mecánica, y se pone en la fila que va descendiendo a uno de los “Palacios del Pueblo”, como se les llamaban en la era soviética, entonces, en ese preciso instante, uno siente que está volando y que los idiomas ya no importan porque el MUNDO es una amplia esfera en donde TODOS hablamos una lengua universal y uno vuela y vuela y VUELA y se alza por los aires y se encamina a la casa del amigo a la que uno llegará en Metro y sin perderse, porque uno llegará y uno, en ese instante, cree escuchar a la Orquesta Filarmónica de Londres interpretando el tema central de la banda sonora de “Superman”… hasta que llega a los andenes ¡y se da cuenta de que no sabe LEER en ruso y no puede siquiera intuir cuales son los nombres de las estaciones del Metro!
Entonces, te das cuenta de que estás ABSOLUTAMENTE PERDIDO y de que por más que preguntes en “español” probablemente nadie vaya a responderte. Entonces, te viene el “pánico escénico” y te quedas como inmovilizado. ¡Santo Dios! ¡Ayuda! ¡Ayuda!
Así es que, en aquella oportunidad, salí del Metro, llame a un conocido ruso y le pedí que por celular le dijera a un taxista cual era mi destino.
“Friansestuya ¿me entiende?”
En otra ocasión también me extravié en el subterráneo camino al metro ”Frunzenskaya” (en ruso: Фру́нзенская). Como, obviamente, sin saber leer uno tampoco habla muy bien… me puse a preguntarle a la gente con sólo dos palabras, pues claro ¿cómo podría decir en ruso: “disculpe ¿usted me podría indicar dónde queda el Metro ”Frunzenskaya”?”. Y esas palabras eran: “¿Friansestuya Metro?”. Y así andaba repitiéndole a todo el mundo, con algunas variaciones en una letra de repente. “¿Friansestuya Metro?”, “¿Frionsestuya Metro?”, “¿Fransestuta Metro?”. “¿Friensestuya Metro?”.
Obviamente, nadie podía contestarme… Hasta que un ruso me observó fijamente y advirtió mi nerviosismo creciente al verme del todo perdido. Y trató de entender lo que decía mirando mis labios. De pronto, exclamo: “¡AHHHHHHHHHH, ”Frunzenskaya!”. Me dieron ganas de abrazarle ahí mismo. ¡Sí: eso: Frunzenskaya…! Me indicó con la mano que tomara la línea de la derecha, dijo algo en ruso y me mostró con los dedos el número 4, así es que entendí que debía bajarme en la cuarta estación.
Gracias a ese bondadoso ruso pude llegar al sitio adonde me dirigía.
Desde aquí y pasado el tiempo le doy mi sincero agradecimiento.
(Франcиско R.)
Новое в блогах и на форуме
Помогите перевести: no haber por donde agarrar
Как это переводится?
Помогите перевести
Эти слова часто ищут, но не находят в словаре. Вы можете предложить их перевод и добавить в словарь.
ДТВ
Искали 79 раз
Mossos de Escuadra
Искали 101 раз
пранкер
Искали 129 раз
desvado
Искали 61 раз
тумук
Искали 120 раз